lunes, 3 de septiembre de 2012

Cosas del verano...


Llevo casi dos meses sin escribir nada, y no porque no tenga cosas que contar, al contrario, sino porque me he dedicado a la gratificante tarea de Crecer Feliz junto a mis hijos... 

En una entrada anterior comentaba sobre dejar salir nuestr@ niñ@ intern@ y permitirle que también jugara y creciera, pero no sabía hasta que punto podía ser tan importante ese detalle. Tomé conciencia hace unas semanas que era una necesidad para mi ofrecerle a mi niña interna la posibilidad de participar en mi vida, que jugara, que cantara, que bailara... Junto a mis hijos, de la mano... Pero también que llorara, que sacara sus miedos, que manifestara sus inquietudes y que mostrara sus "heridas"... Todo ello para que pudiera sanarse y crecer feliz... Porque sólo de esa manera, dejando crecer a mi niña y sintiendo esa armonía, podría conectar de manera sincera con mis ángeles (como me gusta llamar a Juan y a Pablo). Y, ¡Vaya si ha funcionado!. Ni siquiera se cómo explicarlo porque es una sensación que te invade por dentro que hace que puedas mirar en clave positiva, que te cargues de una paciencia casi infinita (esa que pensabas no ibas a poder tener en la vida), que no pierdas la perspectiva de tu papel como madre, que no te hundas en los errores y que los valores como oportunidades, quitarte el lastre de una imagen que quieres proyectar y simplemente fluir y permitirte ser tu misma... Y mirar hacia atrás con una sonrisa en los labios y la mente y el cuerpo en paz...

Me adentré en este crecimiento de manera consciente hace algunos meses, pero realmente considero que en estas semanas es cuando he dado pasos de gigante, y no puedo más que sentirme muy feliz y privilegiada. Evidentemente sigo creciendo... Lo hacemos durante toda la vida, pero desde lo más profundo de mi corazón siento que ha habido un antes y un después, que si antes el amor invadía mi cuerpo, ahora soy más afortunada porque tengo más herramientas para conectar conmigo misma y con mis niños, respetarme y respetarlos, quererlos y quererme.

Habrán lectores que se sientan identificados  con estas líneas, otros que lo vean como un rollo místico que vete tú a saber qué tiene que ver con jugar con tus hijos, que al fin y al cabo es de lo que va este blog, ¿No?. No pretendo que lo entiendan, pero es verdad que me moría de ganas por compartirlo porque realmente creo que tiene TODO que ver... Bueno, y para decirles que esta es la base por la que regreso con las pilas cargadas, con energías renovadas y con el entusiasmo de compartir con quien le apetezca la aventura de ver crecer feliz a su pequeñ@... Entre risas, canciones, cuentos y sobre todo, jugando.

5 comentarios:

  1. ¡Ay Sabina! Cómo me ha gustado lo de conectar con una misma y con sus hijos, respetarte y respetarlos. Estoy iniciando este camino pero me siento perdida y revuelta. Y este post algunos padres lo necesitamos, porque también queremos crecer felices. Gracias preciosa!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola preciosa!
      Siempre tienes lindas palabras para mi... Gracias se me queda corto. En cuanto a tu propio crecimiento, ¡Enhorabuena! Has tomado una decisión muy difícil, a mi me resultó muy doloroso muchos momentos porque no entendía y me costaba aceptar situaciones, porque revolver lo que uno tiene escondido o tapado... Da vértigo. ¡Mucho ánimo y más fuerza aún si cabe! Realmente merece la pena, o por lo menos yo lo veo así, si no... No hubiese escrito esta entrada. Besos <3

      Eliminar
  2. Amiga, cuánto me alegro por ti... de corazón. Eres grande... grande en muchos aspectos, que ya te he dicho en otras ocasiones (gran persona, gran madre, gran hija, gran amiga...) de verdad te lo digo... Y en parte me das un poquito de envidia, envidia sana, y envidia de alegría: por el proyecto que llevas a cabo, por ese crecimiento conscientemente que comentas...
    La niña que tengo dentro también la saco en muchas ocasiones con mis príncipes. Y espero que nunca se me vaya y compartirlo contigo.
    Suerte Sabi!!!!! Gracias por compartirlo!!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y cuanto me alegro yo de poder compartirlo y vivirlo contigo Yani!! Tengo la fortuna de tenerte como amiga, y sabes que me he sentido inspirada muchas veces por ti... Es recíproco lo que sentimos, y no puedo decir más que gracias y que también deseo que sigamos apoyándonos la una a la otra toda la vida que nos queda por delante... Que es mucha!!! Mil besos

      Eliminar
    2. Gracias!!!!!
      Muaaaaaac!!!!!!

      Eliminar